jueves, 29 de diciembre de 2011

¿Quién es Ramón Warfi Herrera Laitan?

El ex militar estuvo ante el juez Federal Guillermo Molinari pero se negó a declarar. El magistrado informó que la indagatoria del 23 fue por la causa denominada Grupo III porque “él estuvo como jefe de Policía entre 1976 a 1979”.

Este represor tiene una frondosa carrera:

Egresado del colegio militar como subteniente de caballería y formado como oficial de inteligencia en campo de mayo.

En el año 75 y con el grado de mayor participa en la zona de operaciones del operativo independencia a cargo de la 5ta Brigada de infantería.

Perfeccionó sus estudios militares en EEUU y en Venezuela en 1976.

Llegó a la policía de Santiago del Estero a fin de de 1976 (pleno proceso) y se mantuvo en el cargo como Jefe de Policía hasta 1979 y bajo sus órdenes estuvo el ex jefe del Departamento de Informaciones Policiales (DIP O SIDE) Musa Azar.

También desempeñó funciones en la escuela de Inteligencia de Rosario y continúo perfeccionándose en Misiones y Mendoza al punto tal que en la década del ‘80 se desempeño como subdirector de la escuela de inteligencia de Campo de Mayo.
A fines del año 82, ya ascendido a Coronel, es nombrado Jefe de Asuntos Institucionales del ejército de Rosario y queda a cargo del programa de recuperación de Subversivos Procesados.

En la actualidad está acusado por los delitos de desaparición forzada de personas, torturas y homicidio calificado.


A la justicia le costo encontrar a este personaje porque habría dado un domicilio falso y cuando lo fueron a buscar no lo encontraron. Ello provoco que se lo declarara prófugo de la justicia y se pusiera una recompensa de $ 100.000 a quien aportara datos.

Hoy esta detenido sujeto a resolución y una vez que decida declarar, hasta ahora se ha negado, se resolverá su situación procesal.

JUEZ FEDERAL GUILLERMO MOLINARI DECRETO LA FALTA DE MERITO PARA LOS GENOCIDAS D’AMICO, SANCHEZ Y FIORINI

El día 21/12/2011, el Juez Federal Guillermo Molinari dispuso la falta de mérito para Jorge D’amico, Leopoldo Sanchez y Cayetano Fiorini ante un pedido de imputación realizado por el Fiscal Federal Gustavo Gimena. Las pruebas aportadas por el Ministerio Público Fiscal (sus legajos personales y documentación de archivo de las FFAA, así como algunos testimonios aportados por sobrevivientes) en su pedido de imputación a los genocidas (que al día de hoy se encuentran libres, caminando por la ciudad como cualquier ciudadano honesto) dan cuenta de su responsabilidad y participación dentro de la maquinaria genocida.

Nuestra Asociación manifiesta el absoluto rechazo a la bochornosa resolución, a contrapelo de las muchas sentencias y pronunciamientos de la Justicia Federal a lo largo y ancho del país donde es reconocida la responsabilidad y participación dentro del plan de exterminio de las jerarquías o del personal de inteligencia de las FFAA de las que sin ningún atisbo de duda Fiorini, D’Amico y Sánchez formaron parte por largos años. En su resolución, Molinari considera que los acusados no emitían órdenes ni tampoco se encargaban de cumplirlas, por lo que se convierte en una novedosa interpretación según la cual los que dan las órdenes no son los “Jefes”, es decir que el por entonces Tte. Cnel. Dante C. Fiorini ,2do. Jefe del Batallón 141, el Tte. 1ro. Jorge D’amico miembro del Estado Mayor como S2 (oficial de inteligencia) y el Sgto. Leopoldo Sánchez “órgano adelantado” en Sgo. del Estero desde el año 1974 , del temible Destacamento de Inteligencia 142 sólo estuvieron por estar .Cuando en realidad y siguiendo el Reglamento RC 16 -1 Inteligencia Táctica del Ejército, sobre todo en la responsabilidad que le cabe a Jorge D’amico y Leopoldo Sánchez este dice: “Las características y capacidades propias de de las tropas de inteligencia posibilitan que estos tengan la responsabilidad primaria en la ejecución de todas las actividades de inteligencia que requieran elementos especializados ya sea para actuar en forma abierta o subrepticia. ”
Nos preguntamos si para que el Juez resolviera lo contrario hubiera sido necesario aportar como prueba una “filmación” donde se vea a los imputados fusilando a un secuestrado o manipulando una “picana eléctrica” en el cuerpo de una se sus víctimas? Desconoce acaso que el macabro plan se llevó a cabo en la más absoluta clandestinidad e ilegalidad y con garantías de impunidad por parte de un poder judicial cómplice?
Si la decisión del Juez Molinari hubiera sido el hacer Justicia, con Verdad y Memoria, su resolución tendría que haber sido la de ordenar la detención de los genocidas en cárcel común; no en countries ni sanatorios donde siguen conspirando contra la justicia y propiciando ataques a sus víctimas y/o denunciantes.
ASOCIACION POR LA MEMORIA, VERDAD Y JUSTICIA – FAMILIARES DE DESAPARECIDOS Y EX PRESOS DE SGO. DEL ESTERO

miércoles, 21 de diciembre de 2011

La multitud y los límites.

Por Rubén Dri *
El 19-20 de diciembre del 2001 los sectores aplastados y humillados por el capital financiero y especulativo salieron al espacio público, a las calles, a las plazas al grito de “¡Que se vayan todos, que no quede ni uno solo!”. Fueron días y días en los que una multitud, para alegría de Toni Negri, recorrió las calles de Buenos Aires, marchó a Plaza de Mayo, se reunió frente a la corrupta Corte Suprema de Justicia y se reunió en asambleas en las que se debatía todo. Era la finalización de un ciclo, el quiebre de un proyecto, mejor dicho de un plan, nada menos que del plan neoliberal aplicado a rajatabla en los ’90 por el menemismo y llevado a su terminación por la alianza que llevó a De la Rúa a la Presidencia. Esa gran pueblada rompía todos los límites. Ya no había más organización, estructuras, representaciones, cámaras legislativas, Poder Ejecutivo. Era como un río que se sale de madre, rompe los diques y las aguas se llevan todo por delante. ¿Había pasado antes algo parecido? Tanto el pueblo argentino como en general los pueblos siempre han protagonizado luchas, puebladas, pero la del 19-20 de diciembre fue de otro tipo, algo que hasta el momento no se conocía.
¿Dónde se encuentran la diferencia o las diferencias fundamentales con otras luchas como las protagonizadas en los ’60-’70, las de los trabajadores patagónicos o la “semana trágica”? Entre las numerosas diferencias, menester es destacar una fundamental que hace a la pueblada que comentamos “única” y que ahora pasa a ser “primera”, porque el fenómeno se está repitiendo en los márgenes del primer mundo. La diferencia fundamental se encuentra en el significado del ¡que se vayan todos!, porque lo que se planteaba era sólo la negación, sin la alternativa correspondiente. Hegel diría que se producía de esa manera la primera negación y si a continuación no se realizaba la segunda negación, el resultado era el infinito malo, es decir, la sucesión ininterrumpida de primeras negaciones que terminaría en la disolución. Es lo que en gran parte sucedió. Pero ¿qué significa la segunda negación? Para responder tal vez sea necesario, en primer lugar, clarificar el significado de la primera negación. Esta consiste en la destrucción o la ruptura de la realidad que es necesario cambiar. Estamos hablando de la realidad en sentido fuerte, la que corresponde a los sujetos en el entramado de sus relaciones económicas, sociales, políticas, culturales, religiosas. Esas relaciones son a veces tan desiguales que los que sufren la desigualdad no la soportan más, quieren destruirlas. Se produce entonces la negación de esas relaciones, la primera negación, destrucción de dichas relaciones. La destrucción o negación en un primer momento, nunca es completa. Quedan más que resabios de la desigualdad o, en otros términos, de la opresión. Se suceden entonces negaciones o destrucciones en un proceso que termina por agotarse y, en consecuencia, se revierte la situación.
Para que ello no suceda se requiere la segunda negación o negación de la negación. Si la primera negación es destrucción, la segunda es destrucción de la destrucción, es decir, construcción. En otros términos, la segunda negación es el proyecto de la nueva realidad que debe sustituir a la que se ha destruido. El proyecto alternativo al neoliberal debía ser necesariamente un proyecto político, una nueva organización de todo el entramado social. Allí estaban las asambleas que, como hongos después de la lluvia, se esparcían por todo el perímetro de Buenos Aires y de muchas otras ciudades del país. Pero ¿qué es lo que predominaba en las asambleas? El rechazo visceral a los políticos que se llevaba puesta también a la misma política, lo cual era comprensible. Lamentablemente, ese rechazo no pudo ser superado en los casi dos años que duró la experiencia masiva asamblearia. A ello contribuyó la concepción de la “multitud” de Negri y la idea peregrina de la transformación del mundo sin poder de John Holloway.
Es un hecho que el espacio de asambleas autónomas que logró realizarse se desgranó como las cuentas de un rosario a las que se les rompió la cadena que las mantenía unidas. De esas asambleas sólo quedan algunas que no sólo duraron, sino que crecieron sobre todo en lo cualitativo. Se suele decir que el colapso asambleario se debió a la presión de los denominados partidos de izquierda que interpretaron el fenómeno como un espacio propio, es decir, un espacio para bajar sus consignas. Efectivamente, las asambleas en las que dichos partidos tuvieron participación importante pronto desaparecieron. En consecuencia, es cierto que ésa fue una de las causas que contribuyeron al colapso de las asambleas. Pero es una realidad que las asambleas que llegaron a construir el espacio de las asambleas autónomas no estaban bajo la presión de los partidos de izquierda. Es necesario buscar en otro lado la causa o las causas de su implosión, y es necesario buscarla en la misma concepción y en la práctica de las asambleas.
La lectura que hacían los actores de la pueblada sobre la destrucción que había provocado el neoliberalismo implicaba el rechazo a toda representación. Habíamos dejado la política en manos de los representantes, miembros de los partidos políticos. Ahora nadie nos va a representar más porque hemos sido traicionados. Esta concepción surgía espontáneamente y recibía la aprobación y fundamentación por uno de los intelectuales que aparece como el verdadero intérprete de lo que nos estaba pasando. Es Toni Negri, quien asegura que el verdadero protagonista ahora no es algo así como la clase o el pueblo, sino la multitud, ésa que se había levantado a la voz del ¡que se vayan todos!, llegaba a Plaza de Mayo en sucesivas oleadas, se reunía en la esquinas, las plazas y los parques. Esa multitud estaba formada por individualidades que no son representables.
Menester es tener en cuenta que la explosión de una pueblada siempre es un momento excepcional en el que se logra la conjunción-superación privilegiada del eros y el logos, el sentimiento y la razón. Son los momentos en los que se abre el horizonte y todo parece posible. Es la gran utopía que se hace presente. De ahí en más es esa utopía la que moverá al pueblo en sus movimientos. El peligro es confundir esa utopía con los proyectos concretos mediante los cuales serán posibles aproximaciones sucesivas. La utopía rompe todos los límites, pero sin límites es la nada. Darse límites es darse forma, es conformarse. Cada límite señala un más allá que invita a ser alcanzado. El sujeto, en este caso el pueblo, que ha roto todos los límites, si no se da a sí mismo los nuevos límites, éstos les serán impuestos desde fuera. Es lo que sucedió en todos los casos de los que se dice que la revolución fue traicionada. Todo sujeto, ya sea el sujeto individual que es cada uno, como el sujeto colectivo, sólo puede crearse como sujeto si sabe ponerse límites, ciencia que el infante aprende guiado por sus padres. Cuando los movimientos que irrumpieron haciendo tabla rasa con todos los límites no fueron capaces de ponerse nuevos límites, éstos llegaron desde fuera. Es así como la revuelta del Mayo Francés, que tanto prometió, terminó en los límites que le impuso el gaullismo.
El ¡que se vayan todos! del 2001 tampoco pudo en un primer momento comenzar el movimiento de ponerse los nuevos límites, es decir, darse una organización que pudiese implementar lo que estaba implícito en el slogan. Los límites vinieron de fuera. Los impuso el duhaldismo. A diferencia de lo que sucedió con el Mayo Francés, cuando los límites del gaullismo quedaron firmes, en nuestro caso, en el 2003 llega al gobierno un “desconocido” patagónico que, para sorpresa de la gran mayoría, comienza a dar las respuestas por las que tanto se había luchado desde abajo, desde los organismos de derechos humanos, movimientos sociales, asambleas. Se bosquejaba, de esa manera, la segunda negación, es decir, un proyecto de país que se encontraba implícito en el ¡que se vayan todos! Los límites parecían venir de fuera, pero en realidad ese “afuera” no era más que el que socráticamente hacía aparecer los límites implícitos en el ¡que se vayan todos!
La devastación que arrasó nuestra tierra latinoamericana hizo lo propio con la tierra europea, especialmente con los que podemos denominar países de segunda, muy semejantes a los del Tercer Mundo, como Grecia, Irlanda, España, aunque ésta e Italia se crean de un Primer Mundo opulento. El movimiento de los indignados amenaza con romper todos los límites, pero hasta el momento no logra hacerlo. Los límites sólo son dañados y, en consecuencia, pueden ser reparados. Es lo que está sucediendo.
A diez años de la gran pueblada del 2001 y de la explosión de las asambleas, nos encontramos en una etapa de reconstrucción del país que el arrasador proyecto neoliberal había destruido. La experiencia de las asambleas no fue en vano. Lo mejor de dicha experiencia hoy se expresa en construcciones sociales de diverso tipo que conforman un entramado social de base que es fundamental para que el proyecto nacional sea realmente popular. El espacio abierto por la gran utopía expresada en las asambleas se ha ido llenando con proyectos concretos, con los límites que el mismo pueblo se ha ido dando. Los desafíos son muchos, las contradicciones no faltan, “estamos haciendo camino al andar”.
* Profesor consulto de la Facultad de Ciencias Sociales (UBA).

viernes, 16 de diciembre de 2011

Detienen al represor prófugo WERFIL HERRERA (mayor del Ejército )‏

Este mediodía se confirmó la captura al prófugo de la justicia en las causas por delitos de lesa humanidad que se tramitan en la jurisdicción de Santiago del Estero el mayor del Ejército WERFIL HERRERA, que fue Jefe de la Policía en la provincia en la dictadura militar desde enero de 1977 a Marzo/79 y que se había profugado luego de que lo citaran a declarar en estas causas.
Se encuentra imputado en casos del Grupo IV (que comprende a las detenciones posteriores al 24/3/76) por lo que deberá ser indagado próximamente.
UNA MUY BUENA NOTICIA PARA TODOS LOS QUE AUN ESPERAMOS POR JUSTICIA, YA QUE SOLO SE JUZGO UN SOLO CASO HASTA EL PRESENTE, EL CASO POR EL ASESINATO DE CECILIO KAMENETSKY.
Santiago del Estero, 16 de diciembre de 2011

ASOCIACION POR LA MEMORIA, LA VERDAD Y LA JUSTICIA. FAMILIARES DE DESAPARECIDOS y EX PRESOS POLITICOS DE SANTIAGO DEL ESTERO

jueves, 15 de diciembre de 2011

Otro miércoles en el Tribunal Federal para exigir justicia



A un año de la elevación a juicio de la denominada “megacausa”, ayer miércoles 14 de diciembre - y tal como venimos haciéndolo los miércoles desde hace más de un mes, realizamos una nueva “parada” en la vereda misma de la sede de la Justicia Federal local para exigir la conformación del Tribunal y una fecha cierta de inicio del juicio oral y público para los más de diez represores entre policías y militares y más de cuarenta víctimas de su accionar.
Hacemos público nuestro repudio a la actitud de jueces y funcionarios de la justicia federal que siguen haciendo de la burocracia judicial un muro de impunidad para proteger a imputados como el ex capitán Jorge D’Amico, a los prófugos -policía Roberto Díaz y los militares Juan José Ramirez y Werfil Herrera; a los ex – jueces Liendo Roca y Santiago Olmedo o a Luis López actual presidente del Tribunal Oral Federal quien en su función de secretario del ex – juez Grand tomaba declaración a los secuestrados políticos en los centros clandestinos y hace unos meses fue sobreseído por falta de mérito.
Es por lo expuesto que: exigimos la depuración de la Justicia Federal que actúa en Santiago del Estero y la celeridad en la realización de los juicios por los crímenes de lesa humanidad.
Memoria para no olvidar, verdad para conocer el destino de todos los luchadores populares asesinados y justicia para condenar a todos y cada uno de sus asesinos y sus cómplices.

martes, 13 de diciembre de 2011

DOCUMENTO POR EL ANIVERSARIO DE LA DECLARACION DE DDHH

En el 63 aniversario de la Declaración Universal de los Derechos Humanos y como todos los 10 de diciembre año tras año, familiares y amigos de detenidos desaparecidos y ex – presos políticos hacemos nuestras las calles para seguir exigiendo con la fuerza del primer día, Memoria, Verdad y Justicia. Memoria para no olvidar, verdad para conocer el destino de todos los luchadores populares asesinados y justicia para condenar a todos y cada uno de sus asesinos y sus cómplices. Este 10 de diciembre que es en parte de celebración por haber logrado condenar a cadena perpetua a tres de los responsables de la inmensa maquinaria genocida montada en Santiago y en el país, también es para seguir gritando que no nos conformamos con sólo una parte de la verdad, que vamos por toda la verdad y por toda la justicia y para denunciar la actitud de jueces y funcionarios que siguen haciendo de la burocracia judicial un muro de impunidad para proteger a nefastos personajes como Jorge D’Amico, o a los prófugos Roberto Diaz, Juan José Ramirez, Werfil Herrera o los ex – jueces Liendo Roca y Santiago Olmedo o a Luis López actual presidente del Tribunal Oral Federal quien en su función de secretario del ex – juez Grand tomaba declaración a los secuestrados políticos en los centros clandestinos y hace unos meses fue sobreseído por falta de mérito. A más de treinta años de lucha levantamos con fuerza nuestras banderas y seguimos exigiendo desde la memoria y la justicia y junto al pueblo una democracia plena sin violencia y la vigencia plena del respeto por los derechos humanos de todos y todas.

* POR EL DERECHO A LA VIDA Y A LA TIERRA DE TODOS LOS CAMPESINOS.

* JUSTICIA PARA CRISTIAN FERREIRA, CÁRCEL Y CASTIGO PARA LOS RESPONSABLES DE SU ASESINATO.

* NO A LA CRIMINALIZACIÓN DE LA POBREZA. EXIGIMOS LA ERRADICACIÓN DE LA TORTURA DE LAS COMISARIAS.

* EXIGIMOS LA DEPURACION DE LAS ESTRUCTURAS DE LA JUSTICIA FEDERAL EN SANTIAGO DEL ESTERO Y CELERIDAD EN LA REALIZACIÓN DE LOS JUICIOS POR CRIMENES DE LESA HUMANIDAD.

ASOCIACIÓN POR LA MEMORIA LA VERDAD Y LA JUSTICIA DE FAMILIARES DE DETENIDOS DESAPARECIDOS Y EX PRESOS POLITICOS DE SGO. DEL ESTERO.

La Bisagra de la Historia

martes, 6 de diciembre de 2011

Opiniones sobre la Celac



La Celac en diez claves

Por Martín Granovsky

En un mundo que transita hacia no se sabe qué, y tampoco cómo ni cuándo, la primera cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe (Celac) es una buena noticia para Sudamérica.

La creación de la Celac, en 2010, fue una iniciativa impulsada por Brasil cuando era presidente Luiz Inácio Lula da Silva que la Argentina apoyó con entusiasmo y el venezolano Hugo Chávez acaba de aprovechar con habilidad en medio del cáncer y a 10 meses de las elecciones presidenciales del 7 de octubre.

El sistema planetario y la futurología son malos compañeros. Antes que definir cómo será la Celac dentro de 20 o 30 años parece más útil mostrar algunas claves de su debut en Caracas.

Clave uno. La Celac no sustituye a la Unasur, la Unión Sudamericana de Naciones creada en 2004, relanzada en 2007 y consagrada en su eficacia regional con la secretaría ejecutiva de Néstor Kirchner en 2010. En términos políticos la Unasur sigue siendo el núcleo homogéneo y, como tal, fue el motor de la Celac. Al impulsar el nuevo organismo, brasileños y argentinos se cuidaron de no diluir a la Unasur, así como la Unasur no diluyó al preexistente Mercosur.

Clave dos. La Celac incluye a México, y el propio presidente Felipe Calderón abrió las sesiones, pero la Argentina no repite viejos esquemas según los cuales México debe ser un contrapeso para el espesor internacional de Brasil.

Clave tres. La prueba de los dos primeros puntos es que Cristina Fernández de Kirchner y Dilma Rousseff utilizaron el marco de la cumbre de Caracas para anunciar la creación de un llamado por los gobiernos Mecanismo de Integración Productiva entre la Argentina y Brasil. “Cuando Brasil crece, crece la Argentina”, dijo el canciller Héctor Timerman en una síntesis que pareció apuntar a una visión: más allá de las diferencias comerciales, que no superan el 10 por ciento del volumen total del intercambio entre los dos países, la Argentina apuesta a subir la escala de la relación con Brasi. Y aquí no hay espacio para la nostalgia sobre el PBI de cada país hace 100 o hace 50 años. Brasil está a punto de superar al Reino Unido en el ranking de las economías más poderosas del mundo y resulta que es el gran vecino de acá al lado. Pragmática, la Argentina actúa según esa realidad y se beneficia de ella tanto en términos económicos como políticos. Un ejemplo del último aspecto es el respaldo de la Celac al reclamo nacional de abrir negociaciones diplomáticas con el Reino Unido para recuperar las Malvinas.

Clave cuatro. Brasil y la Argentina no abandonaron a Venezuela ni como apuesta regional (centrada en el potencial energético de los venezolanos y en su rol creciente de puente entre Sudamérica y el Caribe) ni como apuesta política (Cristina y Dilma prodigaron gestos de cariño incluso personal a Chávez, que pelea con la biología y contra el tiempo para un eventual armado oficialista de cara a las elecciones).

Clave cinco. La euforia del presidente cubano Raúl Castro, que calificó a la Celac de la iniciativa más importante de los últimos 200 años, muestra otra cara del nuevo organismo. No reemplaza a la Organización de los Estados Americanos, que sí incluye a los Estados Unidos y tiene apartada a Cuba, pero sigue vaciando de contenido concreto a la OEA. Y, de paso, ofrece un paraguas de amplio espectro político para que Cuba pueda emprender una transición lo más ordenada posible desde la revolución hacia la construcción de un capitalismo mixto que no termine un buen día con una invasión de empresas inmobiliarias de Miami.

Clave seis. La Celac es otra forma más de reunirse y discutir en un mundo multipolar que se encuentra en plena reformulación. Los Estados Unidos, que aún son la única hiperpotencia militar, estos días respiran aliviados ante la caída del índice de desempleo al 8,6 por ciento, por debajo del 9 que parecía imposible de perforar. La Europa comunitaria discute ya sólo la medida en que cada país se reservará alguna cuota de soberanía ante la decisión alemana de convertirse en el gendarme fiscal de sus 27 socios, que así dejan de serlo para transformarse en pupilos. Beijing desacelera el crecimiento sin enfriarse mientras avanza en una sorda disputa naval, típica de la Guerra Fría, a ver quién predomina sobre quién en el Pacífico y el Mar de la China. Rusia hace lo propio con su marina en el Báltico. En ambas regiones está en juego no sólo el acceso a mercados, sino el control de riquezas naturales submarinas a explotarse en el futuro, desde petróleo y gas hasta yacimientos de oro.

Clave siete. En la multipolaridad hay instancias de construcción de poder regional nítido, como Unasur o el Nafta, y también instancias más débiles con objetivos menos permanentes, de composición más heterogénea o de conversión en foros de debate. Un ejemplo son los Brics, que integran Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica. No tienen un objetivo militar común, pero sí disputan juntos cuotas mayores de poder en el Fondo Monetario Internacional e intentan terciar en la crisis europea para evitar una caída brusca de la UE. Otro ejemplo, donde hoy se concentra la tensión de la discusión sobre los modelos internacionales de desarrollo, es el G-20, con presencia de dos latinoamericanos en sintonía (la Argentina y Brasil) y otro alineado con Washington, como México.

Clave ocho. México ya eligió el Nafta (fruto de una decisión política de integración con los Estados Unidos y a la vez consagración de una dependencia comercial y económica respecto del mercado norteamericano), pero un futuro gobierno del Partido Revolucionario Institucional que surja de una victoria eventual el 1ª de julio puede necesitar que a mano haya un foro donde retomar cierta dimensión simbólica de autonomía cultural respecto de su gran vecino. Esa perspectiva sería aún más acuciante si el presidente que suceda a Calderón, del conservador PAN, decidiera cambiar la actual estrategia de enfocar la lucha contra el narcotráfico como una guerra. El enfoque no es sólo intelectual: en México ya murieron más de 40 mil personas en los últimos cuatro años, el narcotráfico no se redujo y el contrabando de armas entre el sur de los Estados Unidos y el norte de México es tan fluido como la trata de inmigrantes.

Clave nueve. La Celac no surge como un organismo dirigido contra los Estados Unidos, y no podría hacerlo por la pluralidad de sus integrantes, pero la mera ausencia de Wa-shington es un indicio de que, siempre que los latinoamericanos eviten el delirio y se abs-

tengan de dar por extinguido el poder de los Estados Unidos, tienen un espacio de autonomía para construir instituciones como Unasur o el Consejo Sudamericano de Defensa.

Clave diez. Chávez no sólo estuvo hábil para utilizar la Celac como una forma de legitimación interna. No podría haber llegado a este punto sin haber desplegado en el Caribe, donde no todos los países son Cuba, Nicaragua o El Salvador, aun con todas las diferencias entre los tres, una diplomacia basada en el activismo que México dejó hace ya 20 años y en la provisión de petróleo más barato.

martin.granovsky@gmail.com



Si les da el estómago puden leer otra opinión sobre esta creación pueden leer esta nota: "La integración al revés" Por Andrés Oppenheimer | LA NACION

Marcha en Monte Quemado por Cristian Ferreyra

Marcha en Monte Quemado por Cristian Ferreyra from El Perro Comunicacion on Vimeo.

jueves, 1 de diciembre de 2011

Bussi, el siniestro




Osvaldo Bayer
Página 12


Murió Domingo Bussi, el general. Una de las más siniestras figuras de nuestra historia. Sí, no se cometería ninguna exageración si cuando se haga referencia a él se diga: “El general Bussi, el siniestro”. Sólo basta recorrer su biografía para constatarlo. La perfidia de sus crímenes llega a lo inimaginable. Y ahí está la pregunta que todavía no nos hemos contestado: ¿dónde aprendió Bussi su oficio de matar con total impunidad? ¿En el Colegio Militar, en la Escuela Superior de Guerra o en sus estadías en Kansas con el ejército yanki o en Vietnam durante su gira? Sea como fuere, fue un criminal de la mayor cobardía y crueldad. Sus crímenes comprobados y por eso condenado son todos de lesa humanidad. Su hazaña máxima como criminal es el haber exhibido el cadáver congelado de Santucho en el Museo de la Represión, en Campo de Mayo. Se le caía la saliva de la boca de puro placer. Pero, además, los mil casos de torturas, de “desaparición”, de asesinatos. El mismo ejecutaba a los presos políticos de un solo tiro. Está declarado por testigos. ¡Ah, general! La degradación. La absoluta validez de la ley del más fuerte.

Y ese episodio tan perverso, donde la vileza ya no tiene palabras para describirlo: cuando ordenó apresar a los vagabundos y los pordioseros de la capital tucumana y los transportó en camiones que los arrojaron por las sierras catamarqueñas, donde murieron de hambre y de frío. Occidental y cristiano el general. Eso ocurrió en tierras tucumanas donde en 1816, en aquel increíble 9 de julio, se cantó nuestro Himno Nacional con aquello tan sabio de “Ved en trono a la noble Igualdad, Libertad, Libertad, Libertad”.

Pero uno, como argentino, sintió aún mucho más vergüenza cuando el pueblo tucumano, ya en democracia, votó a ese abyecto personaje como gobernador de Tucumán. ¿Qué hubieran pensado los congresales de 1816 al saber que en esa misma tierra libertaria se había votado al abyecto supremo? Ahora, esos que lo votaron de los barrios bien y de los barrios que exigían “más seguridad” tendrían que tener el coraje civil de marchar frente a la Casa de Tucumán y pedir perdón por tamaña acción de burlar para siempre a la democracia.

Lo mismo que tendrían que hacer los diputados del radicalismo y de otros partidos conservadores que votaron el “Punto Final” de Alfonsín por el cual quedó en total libertad la jauría uniformada de la desaparición como método.

El “general” Bussi. Cuando trasladó el centro clandestino de detención de Famaillá al Ingenio Nueva Baviera, ahí sí que se sintió dueño de la vida y de la muerte. Dueño y señor de la picana y el submarino y de toda clase de torturas aprendidas en el General Staff College de Fort Leavenworth, en Kansas. Claro, siguieron las huellas de aquel general Julio Argentino Roca cuando mandó comprar diez mil remington, el invento estadounidense con que se había eliminado a los pieles rojas y a los sioux. Y con ellos Roca demostró que los argentinos somos los mejores europeos y americanos del norte. Videla, Menéndez, Bussi... la lista es larga. Pero por fin muchos de ellos ya están en cárceles comunes y retratados para siempre en el diccionario de la infamia.


Murió Bussi. El espectro de la infamia. General de la Nación. ¿De qué Nación? No aquella del 25 de Mayo ni de 1813 y del 9 de julio tucumano. No, la fiera sanguinaria salida de claustros castrenses argentinos y entidades “educadoras” norteamericanas. En su entierro, los argentinos que salieron a la calle para gritar “dónde están los desaparecidos” gritarán: “Nunca más”. Nunca más un general Bussi. El siniestro.

Fuente original: http://www.pagina12.com.ar/diario/elpais/1-182037-2011-11-25.html
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Imagenes del día del Veredicto

Video de la Sentencia

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